Simó i Béré

Int. Casa Simó. Dormitorio. Día.

En la pantalla del ordenador aparece el visualizador sicodélico de colores que cambian de forma al ritmo de la música. Empieza a sonar “Sé de un lugar”, de Triana.

SHAHRUKH OFF

Aunque llevaban varias semanas viéndose, fue escuchando aquella canción concreta cuando Simó y Béré tuvieron la sensación de estar verdaderamente juntos. Fue un momento tan profundo y hacía tiempo (si no nunca) que ninguno de los dos había sentido nada parecido que, aunque no lo verbalizaran ambos decidieron por su cuenta...

SIMÓ y BÉRÉ, estirados en la cama, escuchan la canción y se acarician.

SHAHRUKH OFF

...no volver a llamarse el uno al otro, al menos por un tiempo prudencial.

Int. Oficina Terapeuta. Día.

LA TERAPEUTA toca y habla con BÉRÉ, que se deja ir y busca relajarse.

SHAHRUKH OFF

Por suerte, esa tarde Béré tenía terapia.

Ext. Terraza Gràcia. Día.

BÉRÉ se toma un té.

SHAHRUKH OFF

Al salir se encontró con uno de sus ex-novios más guapos y pensó que...

BÉRÉ se encuentra con EX-NOVIO MUY GUAPO.

SHAHRUKH OFF

...el sentido de ese re-encuentro era tomar distancia...

BÉRÉ y EX-NOVIO MUY GUAPO hablan. Se nota que hay algo entre ellos.

SHAHRUKH OFF
...respecto a lo que acababa de sucederle con Simó.

Int. Casa Simó. Dormitorio. Día.

SIMÓ intenta escribir sin éxito.

SHAHRUKH OFF

Simó, por su parte decidió usar la excitación química del posible enamoramiento para escribir, pero fue interrumpido por la visita sorpresa...

Int. Casa Simó. Patio. Día.

SIMÓ termina de prepararse una ensalada de aguacate.

SHAHRUKH OFF

...de un viejo amigo de la adolescencia con el...

Su AMIGO JUNKIE se prepara un chino de heroína y fuma.

SHAHRUKH OFF

...que pasó la tarde discutiendo de política.

AMIGO JUNKIE

Les úniques estratègies amb probabilitat d’éxit són les que contemplen substancialment la violència.

El AMIGO JUNKIE ofrece fumar a SIMÓ, que niega.

SHAHRUKH OFF

Al día...

Int. Bar Ad Libitum. Día.

BÉRÉ está trabajando como camarera, cuando llega su HERMANA PEQUEÑA.

SHAHRUKH OFF

...siguiente, mientras Béré se veía obligada...

La HERMANA PEQUEÑA de BÉRÉ le echa la bronca.

HERMANA BÉRÉ

¿Qué haces aquí?

SHAHRUKH OFF

...a suavizar ciertos nudos familiares con su hermana pequeña...

El JEFE del bar observa esto.

SHAHRUKH OFF

...en el trabajo...

Ext. Calle productora. Día.

SIMÓ y el DIRECTOR JOVEN cruzan la calle.

SHAHRUKH OFF

...Simó acudía a una reunión...

Int. Despacho productora. Día.

SIMÓ se reúne con VARIOS PRODUCTORES y el DIRECTOR. Toman café y fuman.

SHAHRUKH OFF

...con el director y los productores de su próxima película...

PRODUCTOR

Algo así como Mar Adentro meets Pretty Woman.

Los otros PRODUCTORES siguen hablando.

SHAHRUKH OFF

...y llegó a la conclusión de que había tirado a la basura...

El DIRECTOR sonríe y da un golpe en la espalda a SIMÓ, que le mira con complicidad.

SHAHRUKH OFF

...sus dos últimos años de esfuerzos creativos.

Ext. Barceloneta. Atardecer.

BÉRÉ corre al lado de la playa, con los auriculares encasquetados.

SHAHRUKH OFF

Béré aprovechó sus ganas de llamar a Simó para hacer ejercicio...

Int. Casa Amigos Simó. Noche.

SIMÓ cena con VARIOS AMIGOS. Entre ellos está la CHICA PRECIOSA.

SHAHRUKH OFF

...de la misma manera que Simó aprovechó su recién resucitada líbido...

LOS AMIGOS juegan a Los Lobos. Todos cierran los ojos y SIMÓ los abre y señala al NARRADOR a quién va a matar:

SHAHRUKH OFF

...para poner su punto de mira...

Es a la CHICA PRECIOSA.

SHAHRUKH OFF

...en una nueva presa.

Int. Bar Ad Libitum. Día.

BÉRÉ trabaja en el Bar. Un CLIENTE GUAPERAS flirtea con ella.

SHAHRUKH OFF

Algo que Béré...

El Cliente Guaperas le pide el número a Béré.

SHAHRUKH OFF

...tampoco se reprimió de hacer con un cliente apuesto...

BÉRÉ vuelve a la barra, se sonríe para si.

SHAHRUKH OFF

...del bar donde trabajaba.

Int. Estació Sants. Día.

SIMÓ corre con una maleta a cuestas.

SHAHRUKH OFF

Jueves por la mañana...

Int. Vagón Ave. Día.

SIMÓ mira con asombro la película que emiten en el tren.

SHAHRUKH OFF

...Simó tenía una reunión...

Ext. Estación Atocha. Día.

SIMÓ corre y pasa ante las esculturas de las cabezas de bebé de Atocha, con su maleta a cuestas.

SHAHRUKH OFF

...en Madrid con un productor al que venderle un nuevo proyecto.

Int. Supermercado. Día.

BÉRÉ pasea por entre los pasillos. Mira a su alrededor.

SHAHRUKH OFF

Béré también decidió...

BÉRÉ intenta robar algún producto poco vistoso.

SHAHRUKH OFF

...aumentar sus ingresos económicos...

Int. Casa Camello. Día.

BÉRÉ recibe una bolsa llena de marihuana...

SHAHRUKH OFF

...y decidió en un impulso...

...de un CAMELLO JOVEN.

SHAHRUKH OFF

...volver a vender Marihuana.

BÉRÉ fuma un canuto con el CAMELLO JOVEN en la terraza del piso.

SHAHRUKH OFF

El camello al que le compró el material...

El CAMELLO JOVEN va sin camiseta y BÉRÉ le mira con cierto deseo reprimido.

SHAHRUKH OFF

...acentuó en Béré la neurosis de estar haciéndose vieja...

BÉRÉ mira su móvil, que parece recibir un SMS.

SHAHRUKH OFF

...neurosis que por suerte perdió fuelle cuando recibió un SMS del cliente galante que había conocido en el bar en día anterior.

Ext. Terraza Bar Madrid. Día.

SIMÓ habla con un PRODUCTOR de estética extravagante y vaso de whisky. El entorno nos deja claro que están en Madrid. La
Latina, tal vez.

SHAHRUKH OFF

La reunión de Simó con el productor...

El PRODUCTOR EXTRAVAGANTE llora. SIMÓ, incómodo, le intenta consolar.

SHAHRUKH OFF

...no estuvo a la altura de las expectativas...

Ext. Calle Gràcia. Día.

BÉRÉ camina con prisa.

SHAHRUKH OFF

...y, justo en ese momento, a 506 kilómetros...

Se cruza con una PAREJA BIEN AVENIDA, acompañados de un NIÑO FELIZ, de ocho años.

SHAHRUKH OFF

...Béré se cruzaba por la calle con su primer novio...

BÉRÉ y el CHICO de la PAREJA BIEN AVENIDA cruzan la mirada.

La CHICA mira al CHICO, inquisitiva. Él la mira.

BÉRÉ aparta la mirada.

SHAHRUKH OFF

...y ninguno de los dos se prestó a saludar al otro.

Int. Museo Madrid. Día.

SHAHRUKH OFF

Simó debía aprovechar...

SIMÓ se emociona ante un cuadro incontestable en el Reina Sofía o en el Prado.

Ext. Calle Madrid. Atardecer.

SIMÓ saluda efusivamente a un AMIGO.

SHAHRUKH OFF

...su visita a la capital...

Int. Bar Canalla. Noche.

En el Negro o en un bar similar, entran y golfean SIMÓ y su AMIGO.

SHAHRUKH OFF

...para buscar...

En el lavabo, SIMÓ y su AMIGO hacen un rulo con un billete y sacan una papela.

SHAHRUKH OFF

...cierta catarsis...

Int. Coliseum. Noche.

Julieta y Romeo, desde platea.

SHAHRUKH OFF

...a la vez que Béré tenía una cita...

Ext. Coliseum. Noche.

El Cliente Guaperas y Béré salen animados del Coliseum. Parece una buena cita.

SHAHRUKH OFF

...con el cliente guaperas...

Ext. Callejón. Noche.

Un CHUNGO atraca a BÉRÉ y al CLIENTE GUAPERAS a punta de navaja.

SHAHRUKH OFF

...que terminó...

El CLIENTE GUAPERAS sale corriendo.

SHAHRUKH OFF

...siendo más frustrante...

BÉRÉ le da todo lo que lleva en la cartera al CHUNGO.

SHAHRUKH OFF

...que otra cosa.

Ext. Estación Atocha. Día.

Con otra ropa, Simó corre y pasa ante las esculturas de las cabezas de bebé de Atocha, con su maleta a cuestas. Esta vez en sentido contrario al anterior.

SHAHRUKH OFF

Viernes...

Int. Vagón Ave. Día.

Simó mira con hastío la película que emiten en el tren.

SHAHRUKH OFF

...Simó...

Ext. Calle. Día.

Simó, aún con su maleta a cuestas se encuentra en la calle con Guionista Exitoso. Se saludan efusivamente y hablan.

SHAHRUKH OFF

...se encontró con un colega...

GUIONISTA EXITOSO

Saps qui m’ha comprat els drets? Stephen Soderbergh!

Simó felicita alegre al Guionista exitoso.

SHAHRUKH OFF

...que le hizo morirse de envidia...

Int. Bar Ad Libitum. Día.

BÉRÉ trabaja en el Bar. Recibe la visita de su PADRE.

SHAHRUKH OFF

...y Béré recibió esta vez...

El PADRE de BÉRÉ le echa la bronca.

PADRE

¿Por qué coño prefieres esto a la tienda?

El JEFE observa esto.

SHAHRUKH OFF

...la visita de su padre en el trabajo.

Int. Casa Amigos Bohemios. Día.

SIMÓ, con varios AMIGOS BOHEMIOS, hace una Jam Session musical.

SHAHRUKH OFF

El finde, Simó se relajó...

Los AMIGOS ríen y beben.

SHAHRUKH OFF

...con amigos de los que algunos meses más tarde se terminaría distanciando...

Int. Casa Gente Acomodada. Día.

BÉRÉ hace una transacción económica con una MUJER EXITOSA.

SHAHRUKH OFF

...y Béré, tras vender un poco...

Ext. Calle Casa Gente Acomodada. Día.

BÉRÉ camina contando el dinero.

SHAHRUKH OFF

...más de hierba...

Ext. Situación Política. Día.

En una manifa o algo así, BÉRÉ vuelve a encontrarse con el EX-NOVIO MUY GUAPO.

SHAHRUKH OFF

...volvió a re-encontrarse...

Ambos se alegran de encontrarse.

SHAHRUKH OFF

...con uno de sus ex-novios más guapos...

Ext. Rambla Raval. Noche.

SIMÓ recibe con galantería a la CHICA PRECIOSA, al lado del Gato de Botero.

SHAHRUKH OFF

...mientras que Simó estrechó el cerco...

SIMÓ y la CHICA PRECIOSA ríen.

SHAHRUKH OFF

...a su nueva presa.

Ext. Bar Borne. Noche.

BÉRÉ y el EX-NOVIO MUY GUAPO beben y ríen.

SHAHRUKH OFF

Béré encontró a su ex-novio guapo...

EX-NOVIO MUY GUAPO

No, ja ho saps. Jo és que sóc molt rígid. Per aixó m’amago amb l’absurd.

Ella se parte de risa con él.

SHAHRUKH OFF

...más seductor que de costumbre...

Int. Bata de Boatiné. Noche.

SIMÓ sale de la barra con un par de copas, apartando a la gente que le rodea.

SHAHRUKH OFF

...mientras que a Simó la cita...

SIMÓ llega a un aparte, donde descubre que la CHICA PRECIOSA se está comiendo la boca con una CHICA EXTRAÑA.

SHAHRUKH OFF

...se le hizo algo cuesta arriba.

Ext. Calle Borne. Noche.

BÉRÉ y EX-NOVIO MUY GUAPO se besan en una esquina con deseo.

SHAHRUKH OFF

Béré, en cambio, a pesar de poder tener una sesión de buen sexo...

Int. Escalera. Noche.

BÉRÉ llama a la puerta del VECINO.

SHAHRUKH OFF

...se dijo a si misma que esa noche prefería dormir sola...

El VECINO abre.

SHAHRUKH OFF

...y se despidió de su ex-novio guapo...

Int. Casa Vecino. Día.

BÉRÉ, el VECINO y el NOVIO de este miran una película de Rohmer en el sofá.

SHAHRUKH OFF

...aunque de camino a casa prefirió hacer una visita sorpresa a sus vecinos...

Int. Calle Casa Amiga. Día.

SIMÓ llama al timbre de casa de su AMIGA.

SHAHRUKH OFF

...de la misma manera que, al día siguiente...

Int. Casa Amiga. Día.

La AMIGA de SIMÓ le tira el IChing. Hay otro AMIGO que se lo mira todo con sorna.

SHAHRUKH OFF

...Simó acudió a una amiga...

Tal vez estén jugando los HIJOS de la AMIGA, ajenos a todo.

SHAHRUKH OFF

...a que le echara el horóscopo chino.

AMIGA

El amor lo tienes jodido, nen.

Int. Bar Ad Libitum. Día.

BÉRÉ se discute con una CLIENTA.

SHAHRUKH OFF

Ese sábado Béré...

El JEFE y la CLIENTA, ambos, pegan la bronca a BÉRÉ.

BÉRÉ

Una cosa és treballar i una altre cosa és anar a cop de fuet.

SHAHRUKH OFF

...trabajó sin descanso en el bar...

Int. Bar Conciertos. Noche.

BÉRÉ acude a un concierto de KLAUS&SUNSET, acompañada de una AMIGA.

SHAHRUKH OFF

...y sintió su agotamiento físico y emocional...

A BÉRÉ se le escapa una lágrima. Nadie lo ve.

SHAHRUKH OFF

...llegar al límite.

Int. Casa Simó. Noche.

SIMÓ vuelve a intentar escribir. Nada de nada.

SHAHRUKH OFF

Simó tampoco logró...

SIMÓ se viste con prisas.

SHAHRUKH OFF

...superar su bloqueo creativo...

Int. Bar Jasmine. Noche.

SIMÓ bebe.

SHAHRUKH OFF

...y no pudo evitar...

SIMÓ ve a CHICA PRECIOSA 2. Establecen contacto visual.

SHAHRUKH OFF

...salir con el único objetivo...

SIMÓ liga con destreza con la CHICA PRECIOSA 2.

SHAHRUKH OFF

...de encontrar otra piel...

Cuando SIMÓ intenta tocar a la CHICA PRECIOSA 2 ella se aparta.

SHAHRUKH OFF

...en la que olvidar a Béré...

Int. Casa Ravaleros. Noche.

BÉRÉ lleva un poco de hierba a unos JÓVENES RAVALEROS.

SHAHRUKH OFF

...quien, casualmente...

Los JÓVENES RAVALEROS invitan a BÉRÉ a chupar de una bolsita de MDMA.

SHAHRUKH OFF

...se encontraba justo enfrente...

BÉRÉ paga a los JÓVENES RAVALEROS.

SHAHRUKH OFF

...de su casa...

Int. Moog. Noche.

BÉRÉ baila como loca con los JÓVENES RAVALEROS.

SHAHRUKH OFF

...vendiendo hierba a unos guiris que a cambio le vendieron algo de MDMA.

Ext. Calle. Noche.

La CHICA PRECIOSA 2 habla con SIMÓ mientras beben latas de beer.

SHAHRUKH OFF

Aunque no hubiesen sabido verbalizarlo...

CHICA PRECIOSA 2

Estoy de duelo por otra relación y no puedo tocar a nadie ni ser tocada por nadie. Pero podemos hacer otras cosas.

Int. Casa Simó. Dormitorio. Noche.

SIMÓ y la CHICA PRECIOSA 2 se masturban cada uno a si mismo, pero el uno enfrente del otro.

SHAHRUKH OFF

...lo que Simó y Béré buscaban era huír de esa vulnerabilidad...

Ext. Rambla del Raval. Amanecer.

BÉRÉ, colocada, conversa sentada en el suelo con una DESCONOCIDA.

SHAHRUKH OFF

...que uno siente cuando conoce a alguien que podría importarle de verdad.

DESCONOCIDA

Triana, tía, esa música era auténtica, estaba hecha con el corazón. Y lo más importante es el corazón.

Int. Casa Simó. Dormitorio. Amanecer.

La CHICA PRECIOSA 2 duerme. SIMÓ escribe.

SHAHRUKH OFF

Y podría ser que ambos finalmente...

Ext. Barceloneta. Día.

BÉRÉ vuelve a hacer footing.

SHAHRUKH OFF

...hubieran conseguido ese objetivo...

Int. Fiesta. Noche.

Mucha gente. Muchos AMIGOS comunes.

SHAHRUKH OFF

...si no hubiese sido porque ese mismo domingo por la noche ambos acudieron a la fiesta de unos conocidos comunes. Y al verse el uno al otro los dos sintieron, esta vez también sin verbalizarlo ni compartirlo, que (para bien o para mal)...

SIMÓ y BÉRÉ se descubren entre la gente.

SHAHRUKH OFF

...aún existían encuentros que podían ser inevitables.

CORTE A:

TÍTULOS FINALES

Visitantes

J y F ante una puerta.

F lleva una carpeta con papeles.

J llama a la puerta.

TOC TOC.

Esperan respuesta.

TOC TOC.

J y F se miran.

Esperan.

Se miran de nuevo.

J llama a la puerta.

TOC TOC.

Esperan.

J llama a la puerta.

TOC TOC.

F: ¿Cuantos años debía tener?

J: ¿Qué? (pausa) No sé.

J llama a la puerta.

TOC TOC.

Esperan.

J: Ocho.

F: ¿Sí?

J: Nueve.

F: Ah.

J llama a la puerta.

TOC TOC

F: ¿Y la gente no lo ve? (pausa) ¿No?

J: No. (pausa) Pero por eso estamos nosotros. No lo digo desde la arrogancia. Yo veo lo que tengo que ver. Y ellos ven lo que tienen que ver. Y así va el mundo. (pausa) Pero así funcionan las cosas. (y llama a la puerta)

TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC TOC

J Y F esperan.

F: ¿Y si no está? (pausa) No, joder, ¿y si no está?

J: Siempre están.

F: Eso no tiene sentido.

J: Ah, ¿tú sabes lo que tiene sentido?

F: Coño hostia puta joder, ¿y si no está?

J: Pues se llama al cerrajero.

F: Pues llamemos entonces.

J: Pero es que seguro que está.

F: ¡Pero si no contesta!

J: ¡Da igual, tío, de verdad, es que siempre están!

Pausa larga.

F: Perdona.

J: (pausa) Te lo estoy poniendo muy fácil.

F: Es verdad.

J: Te lo estoy poniendo muy muy fácil.

F: Sí, tienes toda la razón.

J: No abuses, tío.

F: Perdón.

J: Es una cuestión de empatía. De humanidad. Te lo estoy poniendo muy fácil, ¿entiendes? Y si te lo estoy poniendo así de fácil es por algo, ¿sabes? Hay algo. Hay algo que me dice que te lo debo poner fácil. Hay algo que me dice que tú eres de los buenos, que tú eres de aquellos a los que se les puede tratar bien porque sabrán, a cambio, tratarte bien. Hay algo en ti que me da ganas de ser suave, de ser blanda, de abrirme y de darme toda. (pausa) A ti. (y abre la puerta) Coño.

J y F miran la puerta abierta.

F: ¿Y ahora?

J: Pues ahora se entra.

F: ¿Entramos? (pausa) ¿Los dos?

J: (pausa) Ya.

F: Claro.

J: Sí. Ahí tienes razón. Tienes nobleza. Ahí tienes razón.

F: Bueno...

J: Hay cosas que se deben respetar.

F: ...¿no?

J: Y yo soy una persona flexible. (pausa) Y ahora voy a entrar.

F: Si quieres entro contigo.

J: No. Tienes razón. Tú ves las cosas. (pausa) Ahora salgo.

J entra.

La puerta queda entreabierta.

F: ¿Qué hay de malo en buscar una mujer que lleve las riendas? ¿Qué hay de malo en buscar una mujer que te diga las cosas que no te puede decir un amigo ni un familiar, una mujer que te marque el camino para que tú te tengas que limitar a ser, a respirar, a actuar, sabiendo que hay una red detrás, una red con curvas, con tetas y con un buen chocho, vaya, pero una red? Supongo, ¿no?, que busco lo que buscamos muchos: Una (beurgh) madre. Quiero decir, es así, a ver, tú cuantos exnovios has tenido más o menos? (...) Vale. Y de todos ellos, ¿cuantos esperaban que les ordenaras la vida, que pusieras orden en su existencia y, en el fondo, aunque fueran de muy machitos, aunque llevaran una moto bien grande, o aunque fueran muy modernos y se comprasen la ropa por internet, cuantos de ellos no estaban pidiéndote a gritos, suplicando, como bebés deformes inválidos, como huérfanos de Dickens, cuantos de ellos no estaban demandándote, chupándote la sangre para que les hicieras de madre? De verdad te lo estoy preguntando, ¿cuántos? (...) No, entre nosotros, ¿cuántos novios no buscaban que les hicieras de madre? (...) ¿Te gusta cuidar? ¿No te gusta que un hombre se muestre débil y frágil y se apoye en ti y a cambio te lo dé todo y se dé todo? ¿Todo él? ¿No te gusta?

La puerta se abre.

J sale de la puerta.

Pausa larga.

F: ¿Qué pasa?

J: Está estirada.

F: ¿Cómo estirada?

J: Ven.

F y J entran. Cierran la puerta.

Pausa larga.

Más larga.

Más larga.

J sale.

J: (pausa) Hola. (pausa) Ahora entrará él. En unos minutos. Con un botecillo. De pastillas. (pausa) Yo soy una persona frágil, ¿sabéis? Me he pasado la vida intentando demostrarme lo contrario, pero a mi edad ya no tengo fuerzas para huir de la realidad. Soy una mujer frágil. Pero a veces me parece que no puedo expresarlo, y si me lo parece es porque no puedo expresarlo. A mi me duelen estas cosas. Yo sufro. Veo esto (señala la puerta) y sufro. Pero tengo que aguantar. Un día decidí ponerme en la situación de tener que aguantar, y ya no hay vuelta atrás. ¿Estoy sola en esto? ¿Aquí no hay nadie que se levante por las mañanas, no todas las mañanas pero muchas mañanas, demasiadas, no hay nadie que se levante por las mañanas y piense: “Hoy no voy a poder aguantar. Hoy no voy a poder aparentar que soy fuerte.”? (pausa) Pero te doy miedo, seguro, porque sé que si me miras a los ojos, cuando veas mi fragilidad, cuando veas mi dolor, verás tu propio dolor reflejado en mis ojos y entonces no podrás hacer otra cosa que huir. Y a mi me da igual que huyas, porque no te conozco, no sé quien eres, pero si llegaras a importarme, uy, si llegara a sentir algo por ti, entonces no, entonces no pienso pasar por que me abandones, así que, por si acaso, por mi bien, yo aguanto. No se puede compartir todo. (pausa larga) Por eso, como mínimo, me gusta cuidar. (pausa) Cuando cuido a alguien me siento un poquito más fuerte. Por eso me gusta cuidar. A la gente. (y abre la puerta)

F sale.

F: He encontrado esto.

F muestra un botecillo. De pastillas.

J: ¿Ah sí?

F: Las tenía al lado.

J: Las conozco.

F: ¿Las conoces?

J: No son definitivas.

F: ¿Qué quieres decir?

J: Que hay que llamarles.

F: ¿Llamar a...?

J: Llama.

F: No respira.

J: Nunca se sabe.

F: ¿Lo ha hecho por nosotros?

J: Por nosotros no.

F: Si no hubiera sabido que íbamos a venir no...

J: Llama.

F: Yo vengo para que firme... (señala la carpeta con papeles)

J: Llama.

F: Tú vienes porque, joder...

J: Llama.

F: Y está claro que si no venimos nosotros vendrán otros, pero...

J: ¿Quieres hacer el favor de llamar?

F: ...¿eso qué coño me importa si soy yo el que ha venido y ha tenido que abrir la puerta?

J: La puerta la he abierto yo, chaval. (pausa) Llama.

Pausa.

F coge su teléfono y marca.

F habla por teléfono. Lo que dice es ininteligible.

F corta la llamada.

F: Dicen que ahora vienen.

J: Con suerte le habrás salvado la vida.

F: Ya es mala leche, ¿no?

J: Pues sí.

F: A ver si se dan prisa.

J: Ya verás como sí.

F: Yo no estoy preparado para esto, yo...

J: Bueno.

F: ...aún no, joder, estoy...

J: Así funcionan las cosas. Si tomas un compromiso debes cumplirlo. Si no lo cumples, el sistema tiene sus mecanismos y tú y yo somos parte del mecanismo. Cuando a la gente le interesa se acoge a él, cuando no nos convierte en su enemigo. Y yo no soy la enemiga de nadie, no voy a aceptar ese papel. Soy capaz de salvarle la vida a un niño de ocho. O de nueve años. Y también soy capaz de decirle a una persona que desprecia los mecanismos que su falta de compromiso tiene una penalización, y esa penalización es perder aquello con lo que no ha sabido comprometerse. Aunque eso que pierda se considere un derecho sagrado o inalienable. Yo no soy la enemiga de nadie. ¿Qué hay de malo en la palabra desahucio? Suena tan mal como ortodoncia, pero todo el mundo quiere una buena dentadura, ¿no? (pausa) Yo espero que lleguen y puedan vaciarle el estómago, yo no le he obligado a nada, yo no la conozco. Pero yo sé los sacrificios que yo hago para poder cumplir con mis compromisos y para respetar los mecanismos que nos rigen. Yo sé los sacrificios que hago y veo los que haces tú. Y no sé porqué hay gente que puede saltarse esos compromisos y otra gente, como tú y como yo, que no sólo no puede sino que además tiene que permitir que otros sí se los salten. Lo que te vengo a decir es que yo no me voy a sentir culpable. Y si alguien debe hacer lo que nosotros hacemos, porque es así como funcionan las cosas, prefiero que sea alguien como tú que que sea cualquier otro, prefiero que sea alguien que vea las cosas. Alguien que sea de los buenos. (pausa) Yo soy flexible. (pausa larga) Joder, con suerte le habrás salvado la vida.

F: Después de esto...

J: (pausa) ¿Qué?

F: ...lo único...

J: Dime.

F: Quiero una cerveza. (pausa) Quiero quitarme esto y tomarme una cerveza.

Pausa larga.

J: (sonríe) Pues claro que me apetece.

Suena una música ye-ye así como de película de espías de los setenta.

Es el timbre del teléfono de F.

J y F ríen timidamente.

F responde la llamada.

F: ¿Sí? (...) Gracias.

F cuelga.

F: Están a punto de llegar.

J y F se miran.

OSCURO.

Desayuna con Sarita (y seis)

Ahora te podría contar cómo en los setenta intentaron asesinar a Bob Marley cuando éste ya era una gran estrella mundial, y cómo no volvió a actuar en Jamaica hasta que se organizó el One Love Peace Concert; y cómo en ese concierto Pete Tosh y Jacob Miller hicieron activismo a favor de legalizing the herb, y que en ese concierto Bob Marley logró que los dos líderes de los partidos políticos enemigos, que estaban prácticamente en medio de una guerra civil, se dieran las manos y prometieran buscar la unity. Y de cómo eso no sirvió de mucho, porque he who does not want to listen will never listen. Os lo podría contar, pero lo único que pienso es en Spike, llorando en el callejón, y en sus vinilos tirados sobre las baldosas de la calle.

Ark of the Covenant, de The Congos.

Kung Fu meets The Dragon, de Lee Perry.

My Computer’s acting strange, de The Robotiks.

Healing of the nation, de Zion Train.

Blackboard Jungle Dub, de Lee Perry también.

Showcase, de Aswad.

Dance Hall Style, de Horace Andy.

Guess who’s coming to dinner, de Black Uhuru.

Y lo único que debería hacer es volver a casa. I dormir la mona.

Pero no me preguntes cómo, he acabado delante del bar de la Barceloneta.

Y sí, Sarita está en la misma mesa en la que estaba ayer por la tarde. La puedo ver desde fuera.

Veo mi reflejo en el cristal. Soy un tío guapo.

Y entro. Pido un café y me siento con ella de nuevo.

Y, esperando que me regale una sonrisa cómo la que me regaló ayer por la tarde, una sonrisa igual, por favor, one as clean and pure, please, que estoy exhausto y creo que voy a romper a llorar de un momento a otro si no aprieto bien la lengua, le digo la primera tontería que me viene a la cabeza:

Desayuna conmigo.












Bonus Track: Playlist de Shen AQUÍ.

Desayuna con Sarita (cinco)

“Te voy a decir una cosa. No te lo vayas a tomar mal, ¿eh, Albert?, los tíos adoptados, al menos con los que yo he estado, tenéis una cosa en común: Sois todos muy apasionados.”

Definitivamente esta tía es gilipoyas.

Gracias, Clara, ahora no me va a saber mal hacer lo que tengo que hacer.

Espero a que se duerma y cojo lo siguiente: Un proyector de DVD, una cámara de video, el teléfono móvil, la Nespresso, y un IPad.

Sí. Ya lo sé. Pero ella tiene de sobras para volvérselo a comprar. Además, no lo valora. Y además me ha dado MDMA y yo soy menor de edad, y me ha dicho eso de que si soy adoptado y ese es un tema que a mi no me hace gracia que se toque así como así. Y además no tiene ni puta idea de dónde vivo. Y le dije que me llamo Albert, porque es bueno que uno siempre dé un nombre falso a la gente de la que no se fía, así que no sé cómo coño me va a encontrar. Y está ha sido la última opción, que lo he intentado todo antes de llegar hasta este extremo, i ja ho saps tu, Lord Almighty, you gotta do sum evil to do a lotta good. Y será mejor que salga ya de aquí porque creo que la pobre está a punto de despertarse.

Shahrukh no me responde al teléfono. Así que me dedico a tirarle piedrecitas a la ventana. Sí, tío, sí, ya sé que son las tres de la mañana, pero mira lo que te traigo, tito, mira lo que te traigo.

Cuando ve todo el matute sus ojos orientales se vuelven redondos como las tetas de Clara.



Quiero efectivo, Shahrukh, y lo quiero ahora.

Shahrukh me deja en medio de la calle, sólo, ara portarà la pastaca.

And I think I’m gonna light me another spliff.

Oh, Lord, I’ll make it up to you.

You know I will.

Shahrukh vuelve a tres caladas de acabarme el canuto. Me da el dinero y se saca los goterones de sudor de la frente. Yo le doy el tesoro.

Cuento los billetes.

Money, money, money. Root of all evil.

Ya lo tengo.

Por fin. Ya lo tengo.

Obadiah, Obadiah. Jah Jah sent us here to catch vampire.

El Kinderheim está lleno, como siempre. Natalia en la barra, sirviendo, y cuerpos y más cuerpos que se enganchan como ventosas, sudando, purgando, rotos. We have the chalice to light up Jah fire, When I and I catch them vampire. Spike ya ha dejado de pinchar, ahora está el niñato a los platos. I and I are gon' set them on fire.



No veo a Spike por ningún lado.

La puta que em va parir. He arribat tard.

Salgo corriendo del bar y corro por entre los callejones. Y creo oír la voz de Spike venir de una esquina. Y me acerco, y sí, ahí está, con su maleta de discos tirada en el suelo, siendo zarandeado por dos tipos con aspecto de ser del este, uno de ellos lleva una barra de hierro y está preparado para machacar y el otro tira a Spike al suelo y luego le gira la cara de una patada con sus cutres zapatillas SPORTSPORT incrustándose en su mandíbula.

Y me despierto con el creck de los dientes de Spike.

Tengo el dinero, digo. Tengo el dinero que os debe Spike.

Y los tipos del este me miran, y ahí es cuando yo me cago de verdad. Y veo a my main man Spike, tirado en el suelo, en posición fetal, no sé si se ha meado encima o no pero está rodeado de orines igualmente, descompuesto como el zombi de la televisión que veía mi hermano esta noche.

Tengo el dinero. Mirad el dinero.

El de la barra de hierro se acerca y me lo quita de las manos.

Mi mandíbula va a salir disparada sin que nadie la toque.

Spike sigue en el suelo, grumoso como un vómito.

El tipo de la barra de hierro asiente.

Claro. Tengo el dinero.

Los dos tipos se van, meando un poco más el territorio, sí, pero se van. Se van con mi dinero, pero a Spike parece que casi no le han tocado. Me siento a su lado, encima de los meados, y lo compruebo. No. Casi no le han tocado. Pero ahora le da por llorar. Me da las gracias y le da por llorar.

No me las des. Es la última vez.

“What?”

Spike, es la última vez.

“What do you mean la última vez, tío?”

A partir de ahora tú cuidas de tu culo y yo cuido del mío. No more partnership.

“What the fuck yer talking about?”

Over.

Over and done.

Este ha sido el último agujero que te tapo.

And you don’t owe me nothing, don’t worry about it.

Y Spike pasa del llanto al enfado y empieza a renegar en inglés y a decir que si yo también le estoy traicionando y luego vuelve al llanto porque supongo que es consciente de que ahora se habría quedado sin piernas si no hubiera sido por mi y yo lo veo clarísimo:

Hay algo mucho peor que ser un vampiro.

Ser un vampiro sin ser consciente de serlo.

Abandono a Spike en el callejón, recogiendo sus vinilos y me meto en el metro.

A true rasta man no go shop no bin shoppn', a true rastaman does not gamble. A true rastaman
does not play card pack. A true rastaman always humble.

Amanece y yo bajo tierra.

Desayuna con Sarita (cuatro)



Cuando Don Drummond toca el trombón es como si la lluvia cayera sobre tu cabeza y las ondas expansivas se multiplicaran dentro tuyo en color verde, violeta y naranja. Coge cualquier atisbo de melancolía de entre la arena de tus pulmones y lo obliga a volar y a bambolearse, a sacudirse el moho. Y sabes que everything is ready and steady. A Don Drummond se le considera uno de los cinco mejores trombonistas de la Historia, y no lo digo yo, lo decía George Shearing, el pianista de jazz, y era además, o principalmente, miembro fundador y creador del smashing sound de los Skatalites, la banda musical que sentó los cimientos de lo que iba a ser la revolución jamaicana que cambiaría la historia de la música del siglo XX as they knew it. Esto es antes de que Lee Perry y Bob Marley se conocieran, antes incluso de que sonara por primera vez lo que luego se vino a llamar Reggae. Esto es cuando aún se estaba creando el Ska como el embrión latente de un gigante que aún no es consciente de serlo.

Y cuando yo escucho a Don Drummond jo vull viure. Pase lo que pase. Cuando escucho a Don Drummond todas esas cadenas que me pesan no desaparecen pero se hacen invisibles y es en esos momentos en los que sólo quiero estar y disfrutar de tener suficientemente vida como para tener aún un poco de ritmo. Y está claro que nada ha llegado tan profundo a la conciencia como el roots, pero para llegar al enzarzado espiritual del dread primero hay que venir de la alegría de vivir ingenua y vital de un rude boy. Y eso es lo que era Don Drummond, un boy muy rude que seguía abiertamente a Rastafari en un temps d’un pais en el que eso aún estaba mal visto, y que tenía serios problemas mentales de psicosis y esquizofrenia. Pero que cuando tocaba el trombón lo petaba. Dinamita. Y por eso Tommy McCook le busca para formar parte de los Skatalites. Y se hacen famosos en cero coma y no paran de hacer bolos aquí y allí y, claro, Don Drummond es un ángel al trombón pero li falta un bull cuando se lo quitan. Y al final the shit hits the fan cuando el uno de Enero de 1965, después de un concierto de fin de año, que los fines de año ya sabemos que son muy malos para estas cosas, no se le ocurre nada mejor que hacer que meterle tres o cuatro puñaladas en el corazón a su mujer, la bailarina exótica Margarita Mahfood, para luego decir en comisaría que no, que esos tajos profundos en el pecho se los ha hecho ella misma, en un ataque de rabia.

A good ol’ Don le encierran en un manicomio y al poco tiempo muere. La versión oficial dice suicidio, la versión de la gente dice un padre paga para que venguen la muerte de su pobre hija a manos de un músico loco.

Pero cuando escucho a Don Drummond yo tengo ganas de bailar y de follar pero que muy muy a gusto.

Y no será por nada que más tarde sus viejos amigos de los Skatalites recordaran al maestro cantando eso de que Don Drummond was the man with the big trombone.

Toco el anillo anticonceptivo que Clara lleva dentro de su coño con la punta de mi polla. Se está mirando en el espejo, agachada, y luego mira mi reflejo, mientras la voy cabalgando algo poseído, o bastante, no me voy a engañar, bastante poseído.



Estoy de pie y tengo que ponerme de puntillas para metérsela bien broader than broadway. Ya hemos cogido el ritmo, do you remember the days of slavery, y me pierdo viendo el vaivén, o la falta de vaivén mejor dicho, de sus pechos perfectamente redondos como pequeñas pelotas de basket, oh, slavery days, pechos fuertes ajenos, a otra cosa, a otro ritmo, orgullosos. Sus piernas, delgadas y oscuras, com canyes de sucre moreno, abiertas y dobladas, temblorosas, y su coño jugoso y así con la boca como sorprendida. A su cara no la miro, porque no para de jadear y de decirme guarradas del palo “¿Así me follas tú? ¿eh?, ¿así me follas tú?” y así lo único que va a conseguir es que me corra antes de tiempo, así que vuelvo a mirar sus pechos de granito que son de por aquí lo que más me ayuda a concentrarme. La verdad es que había decidido no volver a ver a Clara, al menos no en esta postura, no porque no me guste ni me lo pase bien con ella, sino porque obviamente no la quiero, no siento nada destacable por ella más allá de que me ponga más que bruto, and I had come to the conclusion de que mi espíritu me estaba demandando dejar atrás este malgastar la energía sexual en encuentros con gente que en el fondo no me importan. Esta trampa de Babylon del sexo como un resorte de placer inmediato al que acudir siempre que te invade la frustración es más peligrosa de lo que parece. Nos hace esclavos. Y nos mata el alma. La energía sexual es algo demasiado poderoso, tratarla como un fast-food sólo te hace más vacío. Y además no hay vuelta atrás: Cada mala semilla que plantas es una zarza de la que luego tendrás que desenredarte. Por eso hace tanto tiempo que no puedo quedarme a dormir con ninguna de las chicas con las que follo. Y por eso había decidido que no iba a volver a ver a Clara. Y es probable que ella lo hubiera intuído, oh, slavery days, porque casi no había cerrado la puerta y ya me estaba poniendo un poco de MDMA en la boca, y de eso también me había decidido a alejarme, you know I’m serious about it, my lord, pero hoy me iba a venir bien para saltarme ciertos prejuicios y hacer lo que hoy tengo que hacer. Creo que voy a correrme. ¿Qué será, me pregunto, qué será en estos momentos de esa chica de sonrisa serena, Sarita y como debe ser, me pregunto también, hacerlo con una mujer que es inválida de cintura para abajo?

Y me corro.

Clara se estira entre las sábanas, está en el otro extremo de la cama, sólo nos tocamos con los dedos de los pies. Debe tener ya cuarenta. Podría perderme mirándola. No van a moverse ni de coña esas tetas. Creo que soy un tío guapo. La verdad es que sí. Entra un golpe de aire. Guay.

Soy un tío muy guapo.

Desayuna con Sarita (tres)



There’s a rat in me kitchen, what am I gonna do? There’s a rat in me kitchen, what am I gonna do?

Mi hermano conduce al ritmo de UB40 mientras esnifa some white powder del hueco donde nace el pulgar de su puño cerrado y me explica que cree que de este se podrá sacar una buena pastaca y yo le miro y, más que de donde vengo yo o de donde viene mi hermana, yo lo que me pregunto es de donde coño viene este tío que tengo a mi lado ahora mismo, porque llevo toda mi vida viviendo con él y aún me da miedo en momentos como este y you best believe que esos genes que le componen no pueden ser normales y hay un brillo en sus ojos que yo sólo he reconocido en un fotograma, que tuve que poner en pause el DVD y todo de lo mucho que me recordaba, de La Semilla del Diablo.

-¿La pasta la debes tú o la debe el pringado de Spike?

La pasta es pasta.

-La pasta es LA pasta.

I’m gonna fix that rat.

No me jodas, Martí, he aprendido mucho con Spike.

-Eso salta a la vista.

Y sí.

Es verdad.

He aprendido mucho con Spike.

La verdad es que sí, joder.

Sí.

He aprendido mucho con Spike.

De historia de la música, de cómo funciona el bisnes, de quién hizo qué y cómo...

...pero sobre todo he aprendido con Spike que la música negra es la voz de los que no tienen voz.

Y si olvidas eso es que no has entendido nada de nada.

-¿No te lo ha dicho ninguna de tus amigas?

?

-...que cuando sólo eras un raperillo chungo tenías más gracia, eras más gracioso...

?

-...más gracioso que ahora que estás hecho un talibán.

Martí alarga el puño y me ofrece un poco de farlopa.

Vale.

Vale. Un poco. Sólo un poco.

I’m gonna fix that rat. That’s what I’m gonna do. I’m gonna fix that rat.

Martí saluda con convincente compasión a una chavala visiblemente yonki o ex-yonki que llora desconsolada, a poco han venido a llevarse el cadáver, la casa es de un viejo, tenía que ser viejo, un piso pequeño, un ático en el Raval, bastante limpio, no repleto de cosas pero algo es algo, yo me hago mi croquis breve, my full story, la yonki o ex-yonki tiene como treintaypocos como mucho, el viejo la debía acoger aquí, por las fotos veo que había vida en común, pero el viejo era muy viejo, joder, ni follar debían, me acuerdo del abuelo y lo que me decía: “tu carda ara tot el que puguis”, collons amb el iaio, “tu carda ara que quan tinguis la meva edat tuturú pà amb tomàquet”, y yo tenía siete años, ja veus, así que la yonki o ex-yonki le debía hacer compañía, al viejo, lo mismo hasta estaban casados, pero por lo que comenta aún no ha venido la familia, la otra familia, así que nos tenemos que dar prisa, nos acompaña el vecino, que es el que nos ha llamado, al que mi hermano le hace un gesto de complicidad mientras consuela a la yonki o ex-yonki y así el vecino marcha y nos deja hacer nuestro trabajo pero por un comentario que ella le hace a mi hermano entiendo que ella también está al corriente de la verdadera naturaleza de lo que hemos venido a hacer aquí y que ella también querrá su parte y entonces entiendo que, aunque está sinceramente afectada por la muerte de su sugar-love-daddy no deja de ser una dona ben pràctica y para ella sacarse un dinero extra no va a ser más que una especie de herencia y mejor sacárselo por su cuenta que tener que compartirlo con el resto de la familia del viejo que seguramente la consideran poco más que una aprovechada, por no decir que le llamen puta a sus espaldas o directamente en la cara, que seguramente lo es, porque no nos olvidemos que por mucho que llore ahora esta mujer es yonki o ex-yonki y eso es así and there’s not much nothing else to it.

Así que mi hermano y yo vaciamos el piso y cargamos la furgo.

Cuando miro a mi hermano pasearse por entre los rincones poniendo sus zarpas por entre recuerdos ajenos, olfateándolos, escudriñándolos y no viendo en ellos nada que no sea traducible en sumas y restas, nada que implique algo emocional, familiar, como un jabalí que arranca matorrales buscando olerle las bragas a tu hermana, en ese momento, ese momento breve que se me expande como un chicle because of the realization wich I have been struck with, entiendo muchas cosas.

Pero no sé cómo coño explicarlas.

El hecho es que sí, efectivamente, entre una cosa y otra, lo sabía, al cerrar la puerta de atrás de la furgoneta y terminar las cuentas, el dinero que mi hermano Judas me pasa es menos de lo que esperaba, y mucho menos de lo que necesito.

-Dos horas de trabajo, tete, yo no me quejaría.

La yonki o la ex-yonki se mete en la casa y sigue llorando. Oh, no, I and I, yo no me quejo.

-¿Te acerco a algún lado?

No. Creo que quiero un poco de aire fresco, y en esto que mi hermano ya está llamando a sus socios anticuarios a los que venderles la fruta fresca.

Jah Rastafari, tu entens, oi, que you got to do sum wrong to do a lotta right, no?

M’entens?

Y el coche de la que debe de ser la otra familia del viejo llega a la vez que la furgoneta de mi hermano desaparece.

Y yo me voy contando el dinero mentalmente y lo que aún me falta y me siento tan rata como mi hermano y encima me da asco el sabor amargo del cielo de la boca y el bum-bum-bum-bum-bum-bum-bum que te da la puta cocaine y me acuerdo de la chica de la silla de ruedas y la sonrisa en el bar, y entonces me viene a la cabeza el SMS...

Dnde andas?

...y entiendo que si son no son ni las dos de la mañana aún estoy a tiempo pero antes...

Tu m’entens, oi, God of all livin’ things, Ruler of Heaven and Earth?

...antes I’m gonna light me a good ol’ spliff.

Doy una buena calada.

Respondo con otro SMS:

Ando xa tu ksa. Si?

La respuesta tarda lo que tarda una segunda calada:

;-)

Desayuna con Sarita (dos)



Zombies sin estómago hambrientos que engullen vísceras que se les caen de entre sus propias vísceras. Mi hermano, que ya empieza a ser ancho, mira la televisión con una lata de cerveza entre los dedos y mi hermana hace queseyó en su cuarto, la mama terminando de cocinar y el papa al despatx, aixecant el pais. Son las diez de la noche y con lo que le he vendido a la chica de la sonrisa del bar de la Barceloneta no tengo ni para empezar. My cup is running over. Los zombies del televisor desmiembran a un malo cuya cabeza, ahora separada de su torso, no deja de gritar.

A finales de los sesenta, Lee Perry ya había inventado el reggae, ya le había dado la patada a sus dos productores, primero a Coxsone Dodd y luego a Joe Gibbs, y ya había formado su legendaria banda The Upsetters y con ellos incluso había dejado la isla para girar durante seis semanas por los UK, la primera gira internacional de una banda de reggae jamaicana, and that’s the truth, Ruth, le había comprado también a Prince Buster un local en el 36 de Charles Street y es allí donde abrió su Upsetter Record Shop y desde donde era el puto amo de la ciudad, y era allí, en esa tienda, en el Upsetter Record Shop, donde aparecía de vez en cuando un joven rude boy, un xitxarel.lo, que cantaba y respondía al nombre de Bob Marley.



Ahora, Bob Marley ya había tenido cierto éxito con Pete Tosh y Bunny Wailer, ¿no?, con The Wailers, pero aún le faltaba algo para redondear su sonido, y estaba al loro de que los Upsetters habían triunfado en Europa. The Wailers era un trío vocal, The Upsetters se la burlaban con sus instrumentales y además tenien la mosca darrera la orella porque el bueno de Lee les estaba sirlando la pasta: Así pues, la ecuación era obvia, obvia como la punta de una zapatilla SPORTSPORT sobre una mandíbula, if you’re following my flow, Wailers y Upsetters debían juntarse. Pero Bob no pidió permiso a Lee Perry para crear esa unión.
Cuando Perry descubrió que sus músicos estaban grabando con Bob Marley se le fue, que ya sabemos que a Lee Perry siempre se le fue, but he got mad, real mad, man, así que fue a buscarle se dice que to loco con ganas de abrirle la cabeza como a un coco. Pero cuando se encontraron, en vez de discutir, Bob le confesó que, joder, había ido a por sus músicos por que necesitaba crecer artísticamente, ¿no?, anímicamente, porque su taza creativa se estaba desbordando y ya no sabía qué hacer. My cup is running over, and I don’t know and I don’t know what to do, yeah. Lee concluyó que el verdadero problema de Bob es que este estaba bajo el dominio de un espíritu demoníaco, un duppy, que estaba amenazando su enorme potencial. Había que vencer a ese duppy. Así que le escribió la canción Duppy Conqueror. Así que los dos, Bob Marley y Lee Perry, empezaron a trabajar juntos y juntos cambiaron la historia del reggae y de la música en general, y es así que Bob Marley se convirtió en una estrella y un faro para todos los sedientos de espíritu en todo el mundo.

Escudella amb cigrons, trinxat, bacallà i un iogur del poble amb melmelada de gerds hecha a mano por ma mare. Estamos todos en la mesa, y está claro que aquí a casa se come gloria bendita God bless Lord Almighty, pero mon pare vuelve que no para con lo de que ya tengo edad para cortarme el pelo y que si parezco la Beth cuando estaba en Operación Triunfo, y no me gusta que me comparen con una puta punani, lo siento, y vuelve con lo de que me ponga a trabajar con mi hermana en las oficinas y esto jode cualquier comida, aunque salga de las manos benditas de mi buena madre, y mi hermana resopla y miro al tete y sigue comiendo ciego y sordo, see no evil hear no evil speak no evil. Pero lo peor del caso es que pensaba pedirle prestado lo que me queda al papa pero obviamente con estas vibas yo no ataco que gat escaldat d’aigua freda fuig.

Así que asalto a la Joana, mi hermana, en medio de la cocina y se lo pido. Sí, ya sé que es mucha pasta, pero le prometo devolvérsela, seré rápido, de veras, amb una setmana o dues t’ho torno, t’ho prometo. Y me pregunta que para qué lo quiero y si me he metido en algún lío, y yo le digo que paso de explicarlo ahora que todo está sucediendo just as we speak, pero que estic bé, de veritat, estic bé, estic molt bé, de fet potser estic millor que mai. Peró necessito aquests diners, and then I will be ready and steady per començar tot de nou un altre cop.

“No et suelto ni un duro si no m’expliques per qué ho vols.”

Vale. És per una moguda que tinc amb l’Spike.

Joana me mira desde el otro hemisferio del planeta durante un par de glaciaciones y luego quiebra el silencio con algo que no entiendo muy bien alrededor de los conceptos de “pagar la culpa”, “aprofitar el que un creu que és un estigma” y, claro está, “l’amor”. El resumen es que no me va a dar ni un duro. Y así me deja sólo en la cocina, y no tengo mucho más que hacer aparte de darle un nuevo lametazo a la melmelada de gerds.

Y en esto se asoma Martí mi hermano con su barriga creciente y me hace la pregunta retórica de si necesito dinero.

¿Tragan lefa las actrices porno?

El Martí se ríe y yo veo al mismísimo Satanàs.

“Ponte la chaqueta-me dice-, he tenido un chivatazo”

Desayuna con Sarita (uno)

La punta de una cutre zapatilla SPORTSPORT está a media uña de incrustarse contra la mandíbula de mi viejo and beloved partner y lo único en lo que puedo pensar en este puto momento, me cago en la hostia, es en que lo siento pero no podría sudarme más la polla. Y de paso la mandíbula de mi so much respected main man me lleva a la sonriente y, no tengo por qué negarlo, besable mandíbula de esa chica en silla de ruedas con la que he hecho negocios esta tarde, o quizás fue hace un año, en un bar en La Barceloneta.

Y me despierto con el creck de los dientes de Spike.

Yo llevaba una bolsa golosa de hierba, no muy brillante, pero daba el pego, mi última cosecha de mi jardincillo de interior, y Scratch, el italiano rasta que siempre decía eso de “A mi no gusta chica de Apolo, a mi gusta chica Luz de Gas”, no estaba en Barcelona pero me puso en contacto con ella, con Sarita, atentos al nombre, porque me dijo que hacer tratos con Sarita es como hacer tratos con él, y si es a nivel de precio pues me iba cojonudo, pero como el parecido fuera tener que aguantarle la chapa como le aguanto a él cada vez que tengo que pasar por el cada vez más tocacojones trance por el que me hace pasar cada vez que tengo que verle, pues me cago en la puta porque no sé si es una buena idea, ahora que lo pienso, no sé qué coño hago aquí, haciendo negocios con alguien que hace negocios con el cuervo de Scratch, ¿no?

Pues no. Porque al entrar en el bar suena algo de Ryan Leslie y pasa algo tan curioso como que lo que a priori sería tan de chiste como esos videoclips de, precisamente, Ryan Leslie, en el que se mete en una limusina con un pedazo de pava del quince, a beauty de eses perfectas envuelta en silk lingerie, y sabes lo cutre que en el fondo es escuchar eso y caer en esa trampa babilónica cuando lo único que tienes tú, pobre de ti, es una bici anoréxica a la que algún vecino patea todas las noches en las que eres lo suficientemente perro como para no subirla a dormir contigo en casa, y son esas mentiras, bien lo sabes tú, las que han hecho de Occidente un imperio decadente que se está resquebrajando bajo nuestros pies, pero ese sueño opiáceo, esos mismos cantos de sirena se hacen realidad en el momento en que, sonando esa canción que te digo de Ryan Leslie, from this time on let’s make a deal, I’ll stay true and you’ll keep it real, caminas hacia Sarita, la chica de la que te habló Scratch, a la que no conoces de nada pero a la que ya viste, al entrar, sonriendo y pensando en que, bueno, no sería mala idea que te estuviera sonriendo a ti en vez de a ese viejo sin dientes anoréxico como tu bicicleta que está sentado en la mesa de al lado de Sarita; y es en ese momento, de esqueleto a bicicleta a silla de ruedas en el que descubres que Sarita va en silla de ruedas, don’t be shy ‘bout how you feel, y es preciosa. Don’t be shy, oh, oh. Joder. Es lo que hay. Sí. Vale. Ella es preciosa.

Le paso la bolsa. Me da el dinero. Estamos en un rincón y las tías del bar no nos ven, y cuando nos ven la saludan con complicidad, ya sean la dueña o la curranta. A mí no me sonríe. Me da conversación y yo esquivo la marea como puedo, apenas sé qué estoy diciendo, porque es ella la que me pregunta a mí, pero yo no sé qué respondo, me interesa más el repicar de sus dedos sobre la mesa, siguiendo el ritmo de la música a ras como un bisturí. Podría decirse que su boca está conectada a sus dedos y esta vibra, ey, levemente, casi como la sombra de una vela, al mismo compás. Tac, tac, tic, tac, tic, tac, tac.

Cuento el dinero. Esto es importante. Cuento el dinero.

Y debo irme, aunque no quiera, porque ella no me predica con su ignorancia como Scratch, y ya me gustaría a mi que estuviera tan necesitada de atención como él, que en todos estos escasos minutos ella no me ha sonreído como antes hizo al viejo. Pero, atención, que justo cuando estoy a punto de perder el contacto visual con ella para el resto de mi vida ella me dice que está aquí, en el bar, todo el día, de mañana a tarde, y parece que me regala un pequeño esbozo de lo que podría ser, sí, joder, sí, hostia, sí, creo que sí, de lo que es, hostia, sí, de lo que es su sonrisa.
Una sonrisa con paz, cómoda, agusto. Lo suficiente como para ser generosa. La sonrisa de una mujer que está contenta con lo que tiene y que piensa defenderlo con uñas y dientes.

Y aparto la mirada y quiero creer, sí, ¿no?, tengo ganas de creer que esa ha sido una entrada.

Y un mensaje de móvil pasa totalmente de pantalla en mis pensamientos:

Dnde andas?

Y un número que no está en mi agenda, pero que localizo de memoria. A playboy, if you heard the news, I could be with other fine girl instead of you.

Me pongo los cascos y me hundo en un asiento del metro. Pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up, pull up.

Anochece y yo bajo tierra.


A la Prinzipal.






Al final, la Béré i el Simó ho han deixat.

Potser angoixat per la ruptura, sembla que ell no surt de casa ni per anar a comprar, ja que contracta un veí indi per què ho faci per ell, en Shahrukh.

En canvi, ella aprofita la seva recuperada independència per sortir al mon, viatjar i experimentar amb amants d’amdòs sexes. Tot i això, troba temps per visitar al Simó de tant en tant, preocupada pel seu aïllament.

Els dos personatges intenten mantenir un relació més enllà de la seva fracassada història d’amor, una pretensió potser contra-natura. O potser no.




"Sé de un lugar"

Ella.



Hacía siete años que no volvía a la India.

Siete.

Eso no es normal. Pero no nos lo podíamos costear. Y cuando nos lo podíamos costear yo me tenía que quedar a trabajar. En el restaurante de mi tío. ¿Habéis estado? Una vez vino Harrison Ford. Tengo una foto. Y Pep Guardiola. Te lo juro. Siete años, decía. Si vais podéis decir que venís de mi parte, Shahrukh, mucho gusto. 10% de descuento. Siete años que no iba a la India.

La India. Es mi casa.

Yo siempre digo que tengo dos madres: La India y España. Ya sé, ya sé, España, Cataluña, no voy a entrar en eso. Está bien. Pero yo tengo dos madres. Y luego está la tercera madre, mi madre, la que me dio a luz. Yo quiero que mi madre esté bien, que sea feliz, que esté activa. Se lo merece, mi madre. Yo creo que hizo un buen trabajo. Creo. Por eso quiero que mi madre comparta cosas con la que sea mi mujer. Por eso siempre he pensado que necesitaba una mujer hindú, una mujer que entienda mi cultura. ¿No? Por eso y porque quiero un matrimonio...

...que dure.

¿Sabéis cuál es el primer paso a la hora de, cuando unos padres buscan pareja para su hijo o su hija, sabéis cuál es el primer paso que dan allí? Porque a lo mejor os pensáis que se hace así, y hay un sistema. Hay una organización.

Lo primero es mirar la carta astral. Del chico y de la chica. Y se comparan. El máximo son 33 puntos, pero si sacas 28 ya se considera que es suficiente. Pero menos de 28 puntos ya la boda no se hace. Se considera que con menos de 28 puntos esa pareja no va a funcionar. Y es por eso que hay pocos divorcios en la India. Sólo un 20% de los matrimonios se divorcian ahí, eso quiere decir que hay un 80% de matrimonios que duran toda la vida. Toda la vida.

Toda la vida.

Por eso duran los matrimonios en la India.

Por eso y porque vosotros os conocéis, os enamoráis, vais al teatro, a cenar, os vais de viaje juntos y al cabo de siete años os casáis. Y empezáis a tener vida de familia. Lo que no habéis hecho en siete años. Y entonces descubrís que no os entendéis. Y a los siete meses os separáis. Nosotros nos casamos, no sabemos mucho el uno del otro pero ya nos casamos, y entonces cuando nos conocemos de verdad y nos entendemos y nos apoyamos, para entonces ya han pasado siete años y tenemos cuatro hijos. ¿Que nos queda entonces? Vivir.

Entonces sólo nos queda vivir.

Y todo eso es lo que yo pienso cuando voy a la India. Porque yo vivo aquí, yo soy de aquí, y yo hago lo mismo que vosotros, si no lo mismo el 99% de lo que hacéis vosotros, y me gusta lo mismo que a vosotros. Y cuando llego a la India y me recoge mi primo y ya me entra ese olor tan fuerte, que es olor de casa, pero que también es un olor de agonía, joder, y de desconfianza. Porque para ellos yo soy como vosotros, y me tratan como a un primo, como si yo no me enterara de nada, y yo me hago el tonto porque sí, porque si así se divierten pues que se diviertan. Y me preguntan que qué hago yo aquí.

Que qué hago yo aquí cuando me levanto por las mañanas, y yo les digo: “Pues lo mismo que tú, tío. Me ducho y me lavo los dientes.” No te jode. Pero tú estás viendo una peli en la India en tu casa y no te enteras de como acaba, porque se apaga la luz en toda la calle así, o te caes o te pasa algo y vas al Hospital y de ahí no sales si no es con los pies por delante. Yo, si me pongo enfermo en mi casa, me muero. Por una gripe que aquí te estás ocho días en cama allí con suerte te queman en una pira en Varanasi. Por eso yo no quiero estar ahí. Y no quiero que mi madre esté ahí. Porque si la India funciona es gracias a Dios, gracias a Dios, no será gracias a los médicos, ni a los políticos, ni a la policía, ni a su puta madre. Será gracias a Dios. Somos un país puntero en tecnología, eh, puntero. Tenemos grandes ingenieros. Tenemos la bomba atómica.

Tenemos la bomba atómica.

Y la gente se muere de hambre.

Y aquí, de nosotros, solo veis pobreza. Pobreza y gente bailando y cantando. Pero los bancos en Suiza a petar con nuestro dinero. Y voy con mi primo a casa de la que quieren que sea mi mujer y yo no me atrevo ni a cruzar la calle, y mi primo se ríe de mi y me empuja para que pase y yo, coño, es que si no me atropellan es un milagro, y al lado veo que pasa un rickshaw, ¿sabéis lo que es un rickshaw? Una bicicleta llevada por un tipo que parece hecho de alambre, y detrás, sentados, dos gordos, pero dos gordos, y muriéndose de risa los gordacos, y el pobre conductor sufriendo como que se le van a salir los ojos de las cuencas. Y yo que voy a conocer a la que será mi mujer. Y sólo voy a tener dos o tres minutos para hablar con ella, para hablar con ella y decidir si quiero casarme y estar con ella el resto de mi vida. Toda mi vida.

Toda mi vida.

Toda mi vida.

Y me pregunto, ¿y si la foto engaña? ¿Y si la veo y es que no quiero ni acercarme? ¿Y si no le gusto yo? ¿Y si ella me gusta a mi pero me dice “Estoy enamorada de otro, por favor, diles que no me quieres”?

¿Y si me dice eso? Porque yo vivo aquí. A mi me gusta lo que os gusta a vosotros. Y entonces llegamos a la casa de la chica, porque allí hay casas, claro, no hay, ¿no? Y llegamos y me presentan a sus padres, y estamos en el salón, y yo estoy sudando, estoy sudando, porque hace siete años que no vengo a mi casa. Tengo veintiseis. En ese momento tenía veintiseis. Me queda el 75% de vida por vivir. El 75%. Y entonces entra ella, con una bandeja con pastas y un poco de chai caliente.

Entonces entra ella.

Entra ella.

Ella.



(ilustración de Nuri Téllez, el texto es de un servidor con la ayuda de Manoj Gautam)

Orfebres

Uno de los mayores placeres de dirigir, si no el más grande, es tener la oportunidad de juntar talentazos que no han colaborado nunca juntos, hacerles multiplicarse entre ellos y gozar con el resultado.

Cuando hicimos "Dibujo de David" me pegué el gustazo de ver el resultado de la ecuación entre uno de mis ilustradores favoritos, Juan Berrio, y un joven animador obsesivo y delicado como es Raúl Echegaray. El resultado fue este segmento del corto(sumado a la música de Max Wright y las voces de Marc Martínez, Vicenta Ndongo y Marcel Borrás, of course).

El gustazo se multiplica a su vez cuando, un tiempo después, ese tándem sigue uniéndose, esta vez sin necesitar tu celestinaje, y crea piezas como esta joya de orfebrería que podéis ver pinchando aquí.


Aquí.

I

Mírate. ¿Te atreves? ¿Sí? Va. Mírate. ¿Qué? ¿Qué te parece? ¿Te parece bonito? Mírate bien. ¿No lo ves? Lo ves. Ya lo sabes. No necesitas que te lo repita. ¿O sí? ¿Va a ser que sí? No eres nada. Nada. No eres nadie. Sin mi. Sin mi no eres nadie. Sin mi no existes. Sin mi no necesitas siquiera que hable. No sé porqué pierdo el tiempo, no sé porqué te presto atención, no sé porqué tengo en la cabeza que se puede hacer algo de provecho contigo. No sé quien debe ser que me haya hecho a mi creer que se pueda sacar algo mínimamente sólido de un esbozo como tú. Pero estoy aquí. Tal vez seré masoquista, o tendré complejo de mártir, pero estoy aquí. Si desapareciera un segundo, te desvanecerías. Me necesitas a tu lado como una sombra las veinticuatro horas del día. Si me duermo un segundo eres capaz de olvidarte de respirar. Pero cuando estoy a tu lado... Ah, cuando estoy a tu lado. Lo sabes, ¿no? Claro. Claro que sí. Cuando estoy a tu lado. No tienen ni la más mínima idea. No saben nada. No tienen derecho ni a mirarte. Y tú lo sabes. Cuando estoy a tu lado todo eso te da igual. Y es así como debe ser. Porque nada vale ni un átomo de lo que tú y yo sabemos. Y yo te lo doy. Yo te lo regalo. Y es así. Es todo o nada. Y quién no lo entienda no nos merece. Ni a ti ni a mi. Y quién no lo entienda está muerto. Quién no lo entienda no existe. ¿Y qué nos tiene que importar la gente que no existe? Porque, ¿tú existes? ¿Tú existes? Yo te lo voy a decir. Tú sólo existes si yo estoy a tu lado. Y ahora estoy aquí. Ahora. Ahora sí. Ahora estoy aquí. ¿Qué vas a hacer por mi? Todo, ¿verdad? ¿Qué piensas darme a mi? Todo, ¿verdad? Claro. Por eso estoy aquí. Contigo. Mírate. Mírame. Estoy. Existes.


II

Yo te cuido. Tú tranquilo. Sé que la vida es complicada. Hay demasiadas ecuaciones que hacer. Demasiadas peonzas que giran a la vez y que hay que mantener en marcha. Demasiadas distracciones y demasiadas tonterías. Porque son tonterías. De verdad, para mi no son más que tonterías. Yo me encargo de todo. Yo lo puedo tener todo en su lugar. Yo me encargo. Yo estoy aquí. Yo me ocupo y me preocupo. Yo ya sufro. Yo ya me aburro. Yo ya cuento, yo ya escucho, yo ya explico, yo ya pido, yo ya demando, yo ya soluciono. Yo te gestiono. Yo te amparo. Yo estoy aquí. Tú vete al ruedo, tú juega, tú coge la espada y tráeme un buen trofeo. Tú tráeme un buen trofeo de guerra. Más te vale salir ahí fuera y hacer lo que tienes que hacer. Más te vale ganarte el plato. De tres, yo saco cinco. De doce, veintinueve. De cien, mil quinientos. Pero tú ya sabes lo que tienes que hacer. Nadie te va a entender como yo. Tus necesidades. Tus verdaderas necesidades. Tú verdadera hambre. Tus verdaderas heridas. Oh, puedo ver tus heridas. ¿Cómo puede ser que nadie las haya visto antes? ¿Es que están todos ciegos o es que has sabido engañarles tan bien? Yo veo tus heridas, y yo tengo la medicina. Y yo sé cuando hay que ser severa. Y cuando hay que ser condescendiente. Y cuando sólo eres un niño. Y cuando puedes ser un héroe. Porque tú puedes ser un héroe. Porque tú eres un héroe. El más grande. Y sólo yo soy capaz de entender al más grande. Es así. ¿Arrogante? Realista. Pero hay que hacer lo que hay que hacer. Yo te cuido. Yo vigilo. Yo vigilo la casa. Sal ahí fuera. Sal y hazme sentir orgullosa. ¿Quién eres? ¿Quién eres? ¿Quién eres? Muy bien. Yo estoy aquí. Y yo estoy contigo.



III

La ecuación es sencilla. Yo la tengo, tú la quieres. No soy difícil. El trato es justo. No hay letra pequeña. Y no hay ganadores ni perdedores, entre nosotros. Es un intercambio, como otro cualquiera. Yo quiero comfort. Simple. Yo quiero tranquilidad. Una buena alimentación, un descanso generoso, belleza, respeto. Y lo doy todo. No quiero huecos, ni recovecos, ni laberintos, ni novelas rocambolescas que me quiten el sueño. No quiero aventuras. No quiero hacer ningún esfuerzo. Yo estoy aquí. Y no me pienso mover. Pero yo quiero lo que quiero. Ese es mi precio. Y sabes lo que te doy, ¿verdad? Sabes hasta donde puedes llegar conmigo. Puedes pasarte la vida jugando. Puedes quedarte en pañales hasta la tumba, puedes ser un viejecito flácido que no haya salido jamás en su vida de la cuna. Es muy sencillo para mi. No es más que un gesto. Y el día que se me haga complicado no podrás ni percibirlo, seguirá siendo un gesto a tus ojos. No te voy a engañar, tengo gustos caros. Pero tú puedes con eso y más. Yo sólo tengo que abrirme un poco. Tengo luz para dar y regalar, ya lo sabes. Y estoy aquí. Es para ti. Es toda para ti. Sólo tienes que cogerla. Sólo tienes que alargar un poco la mano. Y darme también lo que necesito. El trato es justo. No soy difícil. Tú lo tienes, yo lo quiero. La ecuación es sencilla. Y estoy aquí.


IV

No estoy aquí. Y no lo voy a estar. Me he ido, si es que alguna vez estuve. No se puede echar de menos lo que nunca se ha tenido, ¿verdad? Es paradójico, este asunto, ¿no? Me tienes presente, pero yo no estoy aquí. Te acompaño a todas las esquinas, pero yo no estoy aquí. Te beso la frente y curo tus heridas, pero yo no estoy aquí. Te duelo entre el estómago y el sexo, pero yo no estoy aquí. Y en mi ausencia está tu fuente, tu fertilidad se multiplica con mi vacío, tu duelo es lo que me da a luz. Y rellenas tus equis con los restos de mi sombra, pero yo no voy a estar aquí. Y no puedes más que caminar, no sabes hacer otra cosa que buscarme, y quién sabe si yo ni siquiera existo. Quién sabe si yo no soy un sueño. Porque yo no estoy. Y en cambio no ves otra cosa. Y soy el aire que respiras. Y el calor que nace de tus manos. Tal vez no sea más que un delirio, un truco de magia, una broma pesada o un engaño visual, un chiste del azar, una pesadilla a medianoche. Pero te sirvo, ¿eh? Te vengo bien. Te doy frutos. ¿Me has dado las gracias? Ah, ¿cómo me las vas a dar, si yo no estoy aquí? Vaya tramposo desagradecido, vaya compañero indolente con el que he dado a parar. No sufras. No espero nada. Sólo te pincho un poco. Pero no puedo hacerte daño, no puedo ni acariciarte, y te echo mucho de menos, aunque nunca haya existido. Te añoro más de lo que tú me necesitas, y sé que me necesitas mucho. Me gustaría estar. Aquí. Me gustaría poder reconocerme. En tus ojos. Es lo que más desearía. Pero no. No estoy aquí. No existo. Pero te lleno, ¿verdad? Te colmo. Aunque no sea nada, soy todo lo que necesitas, ¿verdad? Yo sí que te siento. Aunque no esté aquí, yo sí que te siento. Conmigo. Siempre.




V

No. No quiero. Ya está. No hay más. No quiero explicarme y no lo voy a hacer. No te voy a dar nada, no quiero darte nada, así que, por favor, para de una vez. No estoy aquí para ti. No estoy aquí para encajar en tus planes. Puedes encadenarme, puedes guardarme en un sótano y tragarte la llave. No te voy a dar nada. Lo que consigas lo habrás robado. No me violes. No me penetres si ves que estoy cerrada. Diente con diente, con los puños apretados, con mis uñas clavadas en mi piel. No me utilices. Búscate otra. Hay muchas por ahí, volando, flotando. No soy un cuenco vacío hecho a tu medida para que tú coloques dentro todas esas ansias sucias y desordenadas que vomitas. Así que para ya. Cada segundo que alargas esto me estás sometiendo, me estás perforando, me enhebras al suelo y aprietas más fuerte el nudo. ¿Eres un monstruo? ¿Eres inconsciente? ¿Cómo puedes sostenerte sobre tus pies sabiendo como sé que sabes lo que estás haciendo conmigo? ¿Cómo puedes ser capaz de atreverte a salir a la luz del sol sabiendo que estoy aquí encerrada sin tener casi aire que respirar ni agua que me calme? ¿Y a mi qué más me da que me necesites ni que me hayas esperado desde que no tenías ni siquiera memoria? ¿Qué culpa tengo yo? No he nacido para ser sacrificio de nadie, y tu dolor o tu hambre me son indiferentes, porque no tienen nada que ver conmigo. Y no he pedido el castigo de la empatía, ni mucho menos tener que abrirte ninguna puerta ni mostrarte ningún camino. Y si tuviera el poder de hacerlo, que ni lo he pedido ni lo he buscado ni sé si lo tengo, si lo tuviera, no quiero usarlo. Porque no quiero estar aquí. No quiero estar aquí. No. No. No. Recojas lo que recojas, yo no te lo habré dado. Porque yo no te voy a dar nada. Nada. Nada. No sé quién te crees que eres. Pero sabes que este no es el camino. No. Esto no es un acto de amor. Esto es un abuso.


VI

Úsame. No quiero más. Todo el mundo tiene un trabajo. Es importante tener un trabajo y saber cuál es tu trabajo. Es importante saber en qué lado estás. Esa es la plenitud: Estar donde tienes que estar. Úsame. No te voy a pedir nada. No tengo derecho. Úsame. Sólo tienes que coger lo que necesites. Disfrútalo. Disfrútate. Pasa un buen rato. Golpéame. Ámame. Tortúrame. Píntame. Fríeme. Rebózame. Explórame. Destrózame. Constrúyeme. Disfrázame. Sórbeme. Ábreme. Saquéame y embózame. Córtame. Reconstrúyeme. Sálvame. Límpiame. Redímeme. Sacralízame. Y reconstrúyeme otra vez. Ese es mi trabajo. Ahí está mi sueldo. Y ahí está mi vocación. Hazme eterna. Muéstrame ahí fuera. Desnuda. Como la verdad, como el agua del que la gente se muere de sed. Conviérteme en eso. Por favor. Conviérteme en algo. Sóplame. Dame aliento. Dame vida. Sólo quiero ser. Sólo tengo que ser. Si no me usas, ¿qué? Si no me usas, ¿quién? Si tú no estás ahí, ¿yo? Por favor. No hace falta, ¿verdad? Dime que no. ¿No? Aquí estoy.




VII

Estoy aquí. Y la traigo. ¿Lo hueles? ¿Notas como te entra por los poros? ¿Notas como invado los agujeros de tu nariz? ¿Notas como empieza a encogerse tu cerebro a golpes? Es para ti. Aquí lo tienes. Y si no soportas el dolor es una buena señal. Si te ahogas en el pozo no te olvides que este es solo el principio. Si las brasas queman tu piel y la abren como escamas al rojo vivo y te desgarra hasta allí donde ni siquiera te quede sangre, si eso empieza a sucederte, no olvides que este es solo el principio. ¿Quieres tu regalo? ¿Quieres saber donde está la sorpresa? Pues ven conmigo. Baja conmigo. Sólo los que son como tú pueden atreverse, sólo los que son como tú pueden llevarle al resto un testimonio. No son lo suficientemente fuertes, lo suficientemente resistentes, como para bajar a buscarlo. Tú no estás jugando. Tú no buscas ninguna placenta. Tú hurgas, y yo sé donde hay que ir. Y no pienso dejar que te conformes con menos. No voy a permitir que tu instinto de supervivencia te traicione. No dejaré que no seas un héroe. Cueste lo que cueste. Vas a resistir. Puedes. Y cuando creas que ya no puedes, entonces, entonces no te olvides que sólo es el principio. Los deformes son ellos, los débiles, los arrogantes. No te darán las gracias, no te regalarán su admiración. Necesitan sentirse más dignos, pero te necesitan, casi tanto como tú a mi. Y te desprecian casi tanto como tú a mi. Pero yo estoy aquí. Y no hay forma, no, ya es demasiado tarde, no hay forma de que desaparezca, no hay forma de que te abandone. Yo no. Yo no te pienso abandonar. Aunque me maldigas un millón de veces, yo estoy aquí. Y sé que me odias, y sé que te quemo, pero yo la traigo. Y nadie va a escucharte. Nadie va a venir en tu ayuda. Somos tú y yo. Estoy aquí. Ya te has entregado, aunque no te acuerdes. Y yo he estado siempre a tu lado, desde antes que decidieras venir, tan sólo me has descubierto. Eso es algo que deberías haber pensado antes, ¿no crees? Ahora ya no hay salida. Y ellos te odiarán, porque lo han construido todo buscando sepultarme, y tú les demuestras que eso es imposible. Pero por eso te necesitan, aunque no quieran aceptarlo. Porque todo el mundo necesita estar alerta, todo el mundo necesita recordarme. Y tú les vas a ayudar. Aunque te escupan. ¿No era eso lo que querías? Ni lo sueñes. Estoy aquí, y no pienso dejar, ni por un momento, ni por un segundo de respiro, no pienso dejar que no seas lo que mereces ser. No. Tú sabes lo que eres. Tú lo sabes. Yo estoy aquí. Contigo. Quiéreme.

VIII

A distancia. Estoy aquí. No tengo que acercarme más. Sin fuego. Sin grandes pasiones. Sin anécdotas. Te doy un poco. Sólo un poco. El resto lo haces tú. El resto puedes hacerlo tú. Es mejor así, créeme. No me necesites mucho. No te apoyes en mi. Soy etérea, ¿no te lo ha dicho nadie? Mi luz no deslumbra, mi luz no ciega, pero tampoco va a hacer tu trabajo por ti. Yo señalo. ¿Te parece poco? Yo señalo, pero el descubrimiento lo tienes que hacer tú. Sí, sí que es mejor así. Es más divertido. Y es más sereno. No hay milagros, no hay regalos, no hay negocio. Pero tampoco estás solo. Qué aburrimiento, entonces, ¿verdad? Qué aburrimiento cualquier otra propuesta. Son todo atajos. Y los atajos no existen. Ah, que se necesita un sacrificio. Pues sacrifícate tú. Vive la experiencia al completo. Pero no hace falta. No hace falta. Tan solo hay que renunciar un poco. Renunciar a las quimeras, renunciar a las leyendas, renunciar a la épica y renunciar a la pereza. Yo sólo señalo el camino. Y es muy lindo así. Es bello. Es armonioso. Y el premio lo consigues tú. Porque te lo das tú. Y yo. Porque también estoy aquí. Aunque no puedas besarme nunca. También estoy aquí. Es mucho mejor así. Todos lo sabemos, que es mucho mejor así. Pero uno a veces se cree los mismos sueños que crea, ¿no? Es fácil que las sirenas se duerman con sus propios cantos. Pero yo no voy a dejarte. Yo te señalo el camino. Yo hago que no lo pierdas de vista. Sólo eso. Y eso lo es todo. Pero hay una cosa, un pequeño detalle, ya lo sabes, es el único precio, y no lo pones tú y no lo pongo yo: Ya estaba escrito así. Es así como funciona. Estoy aquí. A distancia.





IX

Tengo una pregunta para ti. ¿Estás ahí? ¿Estás atento? ¿Estás abierto de orejas? ¿Tienes el pecho poroso? No tengo prisa en que me respondas; pero dime, ¿qué vas a hacer para ganarme? ¿Qué vas a hacer para asegurarte de que yo esté al otro lado de la meta? ¿Qué piensas hacer? Porque siempre hay alguien que pueda ser más rápido que tú. O más astuto. O más luminoso. ¿No soy un incentivo suficientemente goloso para ti? ¿Piensas insultar mi belleza? ¿Cómo sé que me mereces? Porque, ¿de verdad crees que me mereces? ¿De verdad lo crees? ¿Por qué te veo tan quieto? ¿Acaso tienes miedo? ¿Acaso crees que eres poca cosa? ¿Eres poca cosa? ¿Eh? No me merezco menos. No me merezco menos. ¿Estás sudando? Yo no te veo sudando. Estás cómodo, ¿verdad? Estás confortable. No te preocupes, el premio será para quien tenga que serlo. Tal vez las cosas se vean bien desde la fila del fondo, así puedes tener bien una imagen general, ¿no? Una imagen tranquila, serena. No hace falta pringarse, ¿no? No todo el mundo tiene porqué enfangarse. También tiene que haber público. También tiene que haber gente que se contente con, gente a la que ya le sea suficiente, que no pida más, gente que ya se quede tranquila siendo, sencillamente, llanamente, espectador. Un simple espectador. Porque no me quieres, ¿verdad? De verdad no me quieres. ¿De verdad no me quieres? ¿Pues a qué esperas? Yo no te veo sudando. Aquí estoy. No pienso moverme. Los hay que ya corren. Aquí estoy. Sólo tienes que levantarte. Había pensado que tú tal vez... ¿Tú tal vez? Aquí estoy. Ya lo sabes. Te va a gustar. Te puedo hacer muy feliz. Te voy a hacer muy feliz. Sólo tienes que intentarlo. Sólo tienes que intentarlo un poco. Yo confío en ti. Más que nadie. Yo no doy segundas oportunidades. Aún puedes un poco más. Un poco más. Aún puedes. Estoy aquí. Aquí estoy. Sí. ¿Sí? ¿Estás ahí?












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